Blog¿Se puede renunciar a una herencia?

La muerte de un ser querido siempre es un momento difícil para los familiares y allegados. Además del dolor de la pérdida, los herederos también se enfrentan a las responsabilidades legales y financieras que conlleva la herencia. Uno de los primeros pasos será pedir en el Ministerio de Justicia un Certificado de Actos de Última Voluntad para saber si la persona fallecida dejó otorgado testamento. En caso de que no dejar hecho testamento, los herederos serán identificados ante notario mediante una declaración de herederos “ab instestato”. Posteriormente, comenzarán los trámites para el reparto de bienes que constituyen la herencia. 

Esta situación puede llegar a ser complicada para algunos familiares, especialmente si no se esperaba el fallecimiento, si la herencia procede de un familiar lejano con herederos dispersos, si los herederos no tienen capacidad para pagar los impuestos necesarios para recibir el legado, si el fallecido dejó muchas deudas… En estos casos, algunas personas se plantean una posible renuncia a la herencia del finado. La pregunta que todos se hacen es si es posible o no renunciar a una herencia que legalmente les pertenece.

¿Qué dice la ley sobre la renuncia a una herencia?

En primer lugar, hay que entender que una herencia son los bienes que la persona fallecida tenía en vida y que son susceptibles de ser transmitidos a sus herederos. Si el fallecido otorgó testamento, en él se indicarán quiénes recibirán sus bienes y en qué medida. 

En todo caso, tanto si hay testamento como si no, la herencia puede ser un quebradero de cabeza para algunos herederos, que no siempre ven ventajoso el hecho de heredar por las obligaciones económicas que esto pueda suponer para ellos. Así, más de un heredero se enfrenta a la pregunta: ¿se puede renunciar a una herencia? La respuesta es sí. 

Afortunadamente, el derecho estatal otorga a los herederos la posibilidad de aceptar o renunciar a una herencia. Una renuncia entra en vigor cuando un heredero firma ante un notario una carta de renuncia, que debe estar acompañada de una declaración en la que se indique que el heredero no asumirá responsabilidades ni reclamará nada de la herencia.

Razones por las que se renuncia a una herencia

1- La herencia tiene más deudas que bienes

Como sabemos, no solo se heredan los bienes y derechos, sino también las deudas. Por tanto, si la deuda es muy alta, se puede renunciar a la herencia. También hay otra opción consistente en aceptar la herencia a beneficio de inventario. Este derecho permite que todas las deudas se cancelen con el patrimonio a heredar y solo en caso de haber excedente, el heredero tomará la pertenencia, pero de lo contrario no tiene la obligación de pagar a los acreedores.

2- Los herederos no pueden pagar el impuesto de sucesiones

Para que la herencia sea efectiva, los herederos deben liquidar el impuesto de sucesiones en la Consejería de Hacienda de la comunidad autónoma donde residía el fallecido. En algunas comunidades, este impuesto puede ser muy elevado aún para herederos forzosos, y siempre si la herencia se da en línea colateral, como por ejemplo tíos-sobrinos.

3- Deudas del heredero

Si el heredero tiene deudas, sus acreedores podrían embargar los bienes de la herencia que va a adquirir. De ahí que muchos decidan renunciar a la herencia, ahora bien, la renuncia a recibir una herencia, puede suponer un delito de alzamiento de bienes en fraude de acreedores, lo cual además del riesgo de la condena penal, llevaría aparejado la nulidad de la renuncia.

Tipos de renuncia

Hay que distinguir dos tipos de renuncia:

1- Renuncia pura y gratuita:

En este caso, el heredero renuncia, pero no lo hace a favor de nadie. Los derechos de la herencia pasarían al siguiente heredero que aparece en el testamento o, si no hubiera testamento o no aparece nada al respecto, pasaría al resto de herederos mediante el derecho de acrecer. Los bienes pasarían al sustituto sin pasar por el heredero original, de manera que el renunciante no tendría que liquidar el Impuesto de Sucesiones, lo deberá hacer su sustituto.

2- Renuncia a beneficio de alguien:

Aquí el heredero renuncia a su herencia a favor de alguien designado por él. Es decir, que sus derechos hereditarios los cede a la persona que quiera. Para ello, la persona que renuncia debe heredar, aunque solo sea por un minuto. Por tanto, el heredero y la persona a la que cede la herencia deberán pagar impuestos, el primero por heredar y el segundo por recibir una donación.

Recomendaciones para renunciar a una herencia

Hay algunos aspectos importantes para tener en cuenta si se decide renunciar a una herencia. La primera es que la renuncia es irrevocable, por lo que, una vez tomada la decisión, no hay marcha atrás. 

En caso de que el heredero que renuncia sea menor de edad, necesita autorización judicial. Por tanto, los padres o tutores legales no pueden por sí solos renunciar a una herencia en nombre del menor de edad. Para lograr la autorización judicial, el juez deberá revisar las razones de la renuncia y autorizarla.

Otro aspecto importante es que, si el heredero tiene deudas y los acreedores conocen la existencia de la herencia a la que tiene derecho, en caso de renuncia, los acreedores pueden pedir al juez que los autorice para aceptarla en nombre de aquel. La aceptación solo aprovechará a los acreedores en cuanto baste a cubrir el importe de sus créditos.

En Parcesa nos preocupamos por los familiares de la persona fallecida, independientemente de si son herederos o no, ofreciéndoles un servicio funerario de calidad avalado por nuestra dilatada experiencia. También disponemos de un servicio de Asesoría Jurídica que ayuda a las familias a resolver cuestiones administrativas relacionadas con la herencia, quedando excluidas aquellas que requieran vía judicial.   No duden en contactar con nosotros para cualquier duda o consulta.